SER DOMINICO
Alberto. OP
Ser Dominico en este tiempo exige la misma pasion e intensidad que se dio en Nuestro Padre Domingo y en quienes "dejandolo todo, lo siguieron" como verdadero Varon Evangelico en nombre de Nuestro Señor Jesucristo, ante la terrible violencia del mundo y sus desvios debemos recordar lo basico de nuestro Catesismo cuando nos menciona al mundo junto al Diablo y la Carne como enemigos a vencer, el mundo pues es ese enemigo que se presenta listo para la batalla y al que nosotros por medio de la Fe y la Palabra, por medio de la vida Sacramental debemos hacer frente con gallardia y sobre todo confiados en que "Todo lo podemos en Cristo que nos fortalece", hoy por hoy la accion del Dominico sea cual sea su identidad dentro de la gran Familia Dominicana, debe estar encaminada a la defensa de la Fe, y al entendimiento de la misma, ante una sociedad cada vez mas descreida, ante muchos catolicos que entre el progresismo y modernismo tan condenado por el gran Papa San Pio X van difuminando su Fe hasta abaratarla terriblemente olvidando que "Lo Sagrado no se da a los perros, ni se entregan las Perlas a los cerdos", la Fe Catolica hoy por hoy presenta dura batalla ante el relativismo y las demas lacras que apartan a muchos de la Unica y Verdera Fe. Nosotros Dominicos estamos en la linea de fuego, seguimos al pie del cañon defendiendo con ahinco la recta Doctrina y caminando con San Pedro Principe de los Apostoles como verdaderos Cristianos, como fieles promesas de amor, ante los desanimados; enseñando y demostrando que Dios aun sigue hablando y actuando en su Iglesia, en la Unica que puede ser llamada como tal, puesto que ella el "Precioso deposito de la Fe" se encuentra plenificado y brillante ante quien busca la Verdad.
Como Dominicos y sobre todo como Cristianos los Catolicos no podemos conformarnos con ser solo Religiosos de Domingo y dias festivos, el Sagrario invita en su soledad (lamentablemente nos olvidamos que Jesus esta ahi y poco lo frecuentamos) a ser verdadera Luz que Ilumine nuestro caminar, no podemos permencer incolumes en nuestra mediocridad ante una Iglesia que nos necesita, que nos recuerda que somo "Piedras Vivas" y no meros espectadores de una epoca.
Que Dios todopoderoso ilumine con su Santo Espiritu Nuestros Corazones y nos active a contemplar su Verdad desde el actuar mismo de nuestras vidas, que desde quienes como Sacerdotes dan su vida en prenda y deben actuar como Cristo mismo, hasta Religiosos y Seglares atendamos la voz del Señor que nos invita a hacer vida su Palabra en nuestras vidas y sobre todo a ser coherentes con la vivificante presencia Eucaristica que dia a dia se renueva en el Santo Sacrificio del Altar y nos es dada por amor.
¡Gloria a Dios por siempre!
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