En esta celebración hacemos memoria conjunta de nuestros
padres y nuestras madres, que nos han precedido con el sello de la fe
de su bautismo y duermen ya el sueño de la paz. De esta forma la
Familia Dominicana expresa la piedad hacia nuestros padres y nuestras
madres, uniendo en única celebración, tanto en la vida como en la
muerte, a quienes nos engendraron también en Cristo y muchísimas
veces nos educaron y nos ofrecieron al seguimiento de Cristo.
Aniversario de los padres difuntos
(Orden de Predicadores)
Los dominicos conjugan perfectamente la alegría, como rasgo de vida,
con la vivencia de la muerte y su alcance trascendente. Baste abrir el
libro de las Constituciones para admirarse ante la preocupación por los
difuntos de la Familia Dominicana. Diez números de este libro precisan
los modos y maneras de recordar las obligaciones que con los difuntos de
la Orden se establecen. Por ejemplo: “En cada convento se celebrará
misa de difuntos: el día 7 de febrero por el aniversario de los padres;
el día 5 de septiembre por el aniversario de los bienhechores y
familiares de la Orden; el día 8 de noviembre por el aniversario de los
hermanos y hermanas.” (Constituciones O. P. 70, II).
Según esta disposición, el día 7 de febrero todos los conventos de la
Orden celebran la misa conventual por los padres de los frailes, una
manera de corresponder a quienes dieron la vida y la primera educación a
quienes siguieron la vocación dominicana. Resulta llamativa la carga
espiritual que la Orden señala a favor de los difuntos de la Orden: una
misa conventual semanal, el rezo del rosario, una vez a la semana, una
vez al día el salmo “De profundis”, etc, etc. Cabría pensar que esta
intensa oración por los difuntos marcaría, en los miembros de la Familia
Dominicana, alguna señal fúnebre, algún sarpullido de fácil tristeza;
nada más lejano a la realidad del talante dominicano. El intenso
recuerdo de nuestros difuntos, nos aviva la alegría de la esperanza
cristiana que se traduce en la risa y en el optimismo bienhumorado.
Fray José Luis Gago de Val, O. P.